Es sabido que México cuenta con múltiples tesoros arqueológicos. Sin embargo, siempre quedan aspectos novedosos y sorprendentes con relación a este patrimonio histórico, en especial para aquellos turistas y aficionados a la cultura de nuestro país, que solo se concentran en lugares de tradicional proyección, como es el caso de Teotihuacan o Chichen Itzá. Por ejemplo, tomemos el caso de Tlachihualtepetl, una estructura piramidal prehispánica que supera en altura a cualquier pirámide maya o teotihuacana. Estamos hablando de la Gran Pirámide de Cholula y en lo que sigue te ofreceremos más detalles acerca de este gran atractivo turístico del estado de Puebla.
La relevancia de la Gran Pirámide de Cholula, se explica principalmente en sus dimensiones colosales: se trata básicamente de un cerro construido por seres humanos. De hecho supera en magnitud a otras gigantescas construcciones mesoamericanas, como por ejemplo, la pirámide de Toniná, en Chiapas.
Pero además, en la cima de Tlachihualtepetl, actualmente se levanta una preciosa catedral desde donde pueden contemplarse los volcanes y montañas cercanos, soberbias auroras y puestas de sol. Se desconoce la razón por la cual los conquistadores españoles abandonaron el lugar una vez que edificaron en lo más alto de Tlachihualtepetl, tal templo católico en honor de la Virgen de los Remedios. Lo cierto es que la vegetación se adueñó del lugar y durante siglos se consideró a la Gran Pirámide de Cholula como un pequeño cerro. Lo más seguro es que, ante la falta de medios para derribar la Tlachihualtepetl, los españoles determinaran abandonarla a la devastación del tiempo y la naturaleza. La gran Tlachihualtepetl está integrada por siete pirámides superpuestas, construidas a lo largo de 600 años.
Gracias a las investigaciones y resguardo del INAH, hoy en día se puede explorar el interior de la Gran Pirámide de Cholula, por lo menos en algunos pasajes de los 8 kilómetros de pasajes subterráneos que incluye en su interior. No es factible descubrir en su totalidad esta construcción prehispánica, como otras de estas dimensiones en otros sitios arqueológicos mexicanos, para no dañar la iglesia de su cúspide, puesto que también se encuentra declarada como patrimonio de la nación.
Atractivos adicionales de este sitio son el Mural de las Mariposas, localizado en el interior de la pirámide y el Mural de los Bebedores, el cual incluye más de un centenar de figuras humanas y que está vinculado al culto del dios del pulque. La Gran Pirámide de Cholula cuenta además, con un excelente museo de sitio. Durante el mes de marzo, para celebrar la llegada de la primavera, se realizan en el lugar muestras de danza prehispánica y de ballet folclórico.