La posibilidad de contemplar hermosos paisajes de bosque y desiertos con aroma de inmensidad, cuerpos de agua de belleza sublime y muchos tesoros históricos y culturales. Una ciudad moderna y poderosa en su actividad industrial. Todo eso nos lo presenta Saltillo y mucho más. La capital del estado de Coahuila es un destino turístico imperdible en el norte de nuestro país. Ciudad importante, dinámica, atractiva, cuenta con alrededores igual de fascinantes, que nadie debe perderse.
El corredor sur de Coahuila, que vincula a Saltillo con Torreón por medio de una moderna autopista, ofrece un cúmulo de atractivos y ventajas para que un viaje por esta ruta, sea una vivencia fuera de serie. Saltillo y sus inmediaciones destacan además, por ofrecer excelentes oportunidades de inversión, en sectores de negocios como el automotriz, metalúrgico, textil y químico.
Qué visitar en Saltillo
Vale la pena disponer de varios días para explorar los sitios interesantes con los que cuenta Saltillo. De inicio sobresale el centro de la ciudad, con su Plaza de Armas, en donde luce una bella fuente denominada “Las Ninfas”, definida por sus recubrimientos azulados. Cerca de allí tenemos el Palacio de Gobierno, construcción de cantera rosa con una sobria proyección neoclásica, así como también amplios ventanales y balcones. En esta zona también aparece el Museo de Venustiano Carranza, con diferentes obras plásticas que nos presentan relevantes episodios de la historia de Coahuila, varias de ellas trabajadas por Almaraz y Taracena.
La Catedral de esta ciudad norteña, sobresale por su singular arquitectura, la cual mezcla distintas tendencias estéticas, como el barroco, churrigueresco, romano y churrigueresco, con gran armonía. Además, en este edificio sacro se conserva una serie de valiosas pinturas, acerca de estampas de la vida virreinal. También relevante, desde una perspectiva estética, es el frontal trabajado en plata, del altar de San José y la Capilla del Santo Cristo, a quien acuden a venerar, año con año, multitudes de parroquianos.
En la ciudad de Saltillo, todo se encuentra relativamente cerca y además de hacer una visita a la fábrica de sarapes, prenda tradicional del estado de Coahuila, también se recomienda acudir al Centro Cultural Vito Alessio Robles, el cual cuenta con un notable mural acerca de la historia del estado, de la autoría de Elena Huerta.
Cómo llegar a Saltillo
A la ciudad de Saltillo se puede arribar desde la Ciudad de México, por Zacatecas o San Luis Potosí, luego de un trayecto de 867 kilómetros. Se ubica a 182 kilómetros de Monclova, 83 km de Monterrey, 426 km de Piedras Negras, 265 km de Cuatro Ciénegas y 182 km de Torreón.
Información relevante acerca de Saltillo
Otros sitios imperdibles en Saltillo, son el Museo Rubén Herrera, el centro Coahuilense de Cultura y el Casino de Saltillo. En el caso de este último, fue edificado en 1698, devastado por un incendio en 1914 por las huestes de Victoriano Huerta y reconstruido luego, para transformarse en un salón de eventos, bar y restaurante.
Saltillo se engalana además, con un notable atractivo para los ecologistas y aficionados a la contemplación de la naturaleza. Se trata del Museo de las Aves, único en todo el territorio nacional y en Latinoamérica por contar con la colección más vasta de aves mexicanas. El Museo de Aves incluye un 70 por ciento de las especies que existen en nuestra nación.
Así de valioso se perfila el Museo del Desierto, recinto de 12 mil metros cuadrados, separado en 4 pabellones en donde se nos explica la interacción entre flora, fauna y medio ambiente, desde hace 12 mil años y hasta el presente. Uno de los elementos más interesantes de este museo, es el esqueleto de un dinosaurio, hallado hace algún tiempo en el estado de Coahuila.
Actividades a realizar en Saltillo
La Iglesia del Ojo de Agua se encuentra en el Barrio de Santa Anita, justo donde nace el manantial de aguas transparentes que le dio su nombre a la capital coahuilense. Allí también aparece la Plaza Nueva Tlaxcala, hermosa construcción neoclásica que muestra el mestizaje cultural de la región y que se combina perfectamente, en su proyección estética, con la Plaza de Armas y el Palacio de Gobierno. Para conocer en poco tiempo todas estas maravillas, se recomienda tomar un tour en el tranvía turístico que parte, todos los días, desde la Alameda Zaragoza.