La cocina mexicana es una de las más variadas y fascinantes del mundo. Combina, desde una perspectiva general, elementos indígenas y españoles. No obstante, en tiempos recientes se ha enriquecido también con influencias de diferentes tradiciones culinarias asiáticas y europeas. En muchos de los mejores restaurantes de México, se sirven platillos de varias entidades de la república. Los visitantes, especialmente si proceden del extranjero, descubrirán que la auténtica cocina mexicana, nada tiene que ver con la cocina tex-mex- la de los famosos burritos-, no obstante ser tan conocida en otros países. Lo anterior se hace patente por el hecho de que, no en todos los casos es picante, ni tan especiada.
Además, en las ciudades mexicanas más importantes, como por ejemplo Monterrey, Guadalajara o la Ciudad de México, se cuenta con innumerables restaurantes de cocina francesa, italiana, argentina, japonesa, china, etc. Y si bien en México, los restaurantes vegetarianos no son muy populares, varios de los antojitos mexicanos más ricos y célebres, no llevan carne.
Ahora bien, los lugares más económicos para degustar lo más particular de la comida mexicana son las fonas familiares, pequeños y baratos establecimientos que hay en pueblos y ciudades, en donde se maneja un menú del día, es decir, la comida corrida. Por lo común esta última incluye cuatro platillos diferentes, además de té o café.
Por lo demás, en México puede saborearse rica comida rápida en restaurantes como VIPS, Señor Frogs, Sanborns o Wings. Pero otros sitios como Taco Inn, combinan lo mejor de la comida tradicional mexicana en el formato de la comida rápida. Sin embargo, es imperdible viajar por los diferentes estados del territorio nacional sin saborear el platillo más representativo de la gastronomía mexicana: los tacos. Para ello hay que dejarse consentir en las taquerías, pequeños establecimientos en donde se sirven estos deliciosos bocadillos de carne y maíz, acompañado de salsa y verdura, en algunas mesas colocadas en torno a la cocina del lugar. También muchas cantinas mexicanas, en especial las de ambiente familiar, además de refrescantes bebidas, sirven botanas variadas.
Otra experiencia sumamente recomendable es la de comer en los mercados populares de los distintos estados del país. En tales sitios, en sus secciones para la venta de alimentos, además de saborear las creaciones regionales más representativas, a precios muy accesibles, uno puede experimentar el ritmo de vida cotidiano de los habitantes de estas comunidades y también, conseguir artesanías y otros muchos productos interesantes.