Para mucha gente, las compras son una de las razones principales para vacacionar en los distintos estados del país. Hay quienes gustan de recorrer elegantes boutiques y joyerías en las ciudades mexicanas más famosas, Otros se decantan por la animación bullangera de los mercados populares y tianguis de artesanías. A veces, entre los rebosantes puestos de verduras y frutas de los mercados mexicanos, pueden encontrarse verdaderos tesoros artesanales. Para el caso de los turistas que provienen de otras naciones, es importante saber que está prohibido sacar de México, piezas prehispánicas.
Los comercios en México, por lo general manejan un horario de 9 de la mañana a 7 u 8 de la tarde, de lunes a sábado. En años recientes han aparecido en las ciudades más importantes del país, grandes plazas comerciales al estilo de las que hay en los Estados Unidos. Casi todas ellas abren los domingos, pero en provincia algunas de ellas cierran los sábados. No obstante, a excepción de tales centros comerciales, tiendas como Sanborns y los supermercados, la vida comercial mexicana continúa girando en torno al mercado del barrio o al tradicional tianguis.
Ahora vamos a profundizar acerca de uno de los productos más atractivos que se pueden adquirir en México, durante unas vacaciones: las artesanías. En nuestro país, las artesanías son un elemento esencial de la cotidianidad, con métodos y prácticas de producción que se van heredando de padres a hijos. Las artesanías actuales en México, se derivan de la combinación del mundo mesoamericano y la cultura europea. Tras acaecer la Conquista, la irrupción de las tecnologías europeas se dejaron sentir en todo el México Antiguo. Como resultado, algunas formas de artesanía nativa, como la plumaria, se perdieron y se ganaron varias más.
Los misioneros españoles enseñaron a los indígenas técnicas europeas, y al mismo tiempo, las ancestrales prácticas de los naturales de nuestra tierra, hicieron surgir hermosas creaciones y procedimientos artesanales. De entre las artesanías más valoradas por los turistas que pasean por nuestro país, sobresalen los trabajos en alfarería, los tejidos multicolores, las artesanías en plata, las cerámicas esmaltadas, los trabajos en bordado, las figuras en barro o papel maché y muchas otras más. No hay que dejar de mencionar los juguetes y tallas de madera, los objetos lacados, los adornos en latón, y la hermosa técnica de la cestería. Las artesanías mexicanas son una garantía de satisfacción estética y motivo de buenos recuerdos en cada visita a nuestra tierra.