La tradición del día de muertos es uno de los referentes de México de cara al mundo. El colorido, el exotismo, la magia atávica y sabía que se desprende de las ofrendas mexicanas del Día de Muertos es algo innegable y por ello atrae mucho la atención de todos quienes se acercan los diferentes destinos de México. Pero tantos detalles y referencias no son casuales ni gratuitos, sino que, las ofrendas de muertos tienen un sentido bien definido, un mensaje articulado a partir de los distintos objetos que incluyen. Es interesante saber más de ello de acuerdo a lo siguiente.
Las ofrendas deben incluir un conjunto de símbolos y elementos que animan al espíritu a transitar desde el ámbito de los muertos, para que conviva con sus familiares durante un día completo. De entre los elementos infaltables de las ofrendas de muertos se pueden mencionar los siguientes: la imagen del difunto, la cual se instala en la parte más elevada del altar.
Se acostumbra ponerla de espaldas y con un espejo frente a ella, para que el difunto únicamente pueda ver el reflejo de sus deudos y estos también solo vean el reflejo de su pariente fallecido; la cruz, símbolo utilizado por los evangelizadores españoles para introducir la doctrina del catolicismo en el México indígena posterior a la Conquista. Esta cruz puede estar elaborada de ceniza o de sal.
De igual manera es importante la imagen de las ánimas del purgatorio, la cual se incluye en la ofrenda por si el difunto se extravía en el purgatorio, para que pueda escapar de allí; copal e incienso, un elemento de raíces prehispánicas que sirve para purificar lugares y personas que lo utilicen; papel picado, representación del entusiasmo festivo del Día de Muertos y de la fuerza divina del viento; agua, flores, calaveras de azúcar, yeso o barro y comida, en especial la que más le gustaba al difunto.
Las ofrendas del Día de Muertos, como hemos podido comprobar, son un caleidoscopio de referencias y detalles folclóricos de raíces prehispánicas y novohispanas. En cada mes de noviembre los interesados en la cultura más auténticamente mexicana, tienen una estupenda oportunidad de conocerla a fondo, al admirar las ofrendas del Día de Muertos que se colocan en distintos puntos de la nación.
Vale la pena visitarlas ahora ya teniendo presente lo que les hemos comentado de manera previa. Gracias a ello podremos “leerlas”, interpretar correctamente sus sentidos variados y comprender a cabalidad su atractivo y tradicional mensaje.