La Sierra Gorda se encuentra en la parte norte de Querétaro y en este recorrido, se pueden conocer 5 misiones franciscanas de admirable proyección barroca, en la cual también aparecen símbolos indígenas en los nichos de sus fachadas y en los adornos interiores. Obra del misionero Fray Junípero Serra son las misiones de Tancoyol, Tilaco, Landa, Concá y Jalpán. Estas construcciones datan del siglo XVIII y por su importancia histórica y belleza estética han sido declarados Patrimonio de la Humanidad. A lo largo de esta ruta se tiene la oportunidad de explorar un gran número de bosques, cascadas y ríos, los cuales son perfectos para el disfrute del turismo de aventura y el ecoturismo.
Recomendamos comenzar el recorrido en San Juan del Río. Se llega a este punto a través de la carretera 57 o también por la carretera 120, si uno llega desde el suroeste. En San Juan del Río destaca el Museo de la Muerte, construcción del siglo XVIIU y también el Puente de la Historia, de 1710. Luego la ruta sigue en dirección a Xilitla, en el estado de San Luis Potosí. A unos 20 kilómetros se llega a Tequisquiapan, población que se define por sus calles estrechas y sus pintorescas plazuelas. En este punto es aconsejable conocer la cava Freixenet, a unos 20 kilómetros de Tequisquiapan.
Otra alternativa para emprender el recorrido la tenemos en el estado de Querétaro. En tal caso, lo que procede es seguir la carretera 45 y posteriormente la 100 hasta arribar a la población de Bernal. En este Pueblo Mágico, sobresale su magnífica Peña, considerado uno de los monolitos más grandes del mundo, un entorno excelente para la práctica del rappel y la escalada.
Desde cualquier punto donde se decida comenzar la ruta, la siguiente escala la constituye, Pinal de Amoles, una comunidad minera, desde donde se puede llegar en cuatrimoto hasta el poblado de San Joaquín, puesto que allí aparece la Misión de Bucareli. La Ruta de la Sierra Gorda, prosigue unos 40 minutos después, hasla llegar a Jalpan de Serra, en donde aparece la primera de las cinco misiones de este recorrido turístico: Misión Jalpan, levantada en 1751 y que se caracteriza por su fachada con un águila de dos cabezas. Aquí se tiene la oportunidad de acudir al Museo Histórico de la Sierra Gordam en donde se atesoran piezas prehispánicas consideradas como patrimonio nacional.
Lo que sigue, a unos 30 kilómetros por la carretera 69, con rumbo a Río Verde, es Concá, sitio en donde encontramos la Misión Concá, la menor en dimensiones, de todas las que incluye esta ruta. Su construcción finalizó en 1758 y sirvió para honrar a San Miguel Arcángel. En la fachada de este complejo arquitectónico se observan figuras simbólicas indígenas. A continuación, volviendo por la carretera 120 unos 20 kilómetros, en la comunidad de Landa, se puede visitar la Misión Landa, construcción dedicada a la Inmaculada Concepción. Destaca por estar rodeada por cuatro columnas ornamentadas con querubines. Vale la pena hospedarse en Landa y pasar una jornada viajera en este pueblo queretano.
Siguiendo la ruta, en el kilómetro diez, se localiza una desviación del lado derecho, y tras avanzar por ella unos 15 kilómetros por un camino de terracería, aparece la Misión Tilaco, la cual estuvo dedicada a San Francisco de Asís. En la fachada de esta misión, en los adornos, se observa un teatro infantil, ornamentado con un cortinaje vasto, sostenido por querubines y cuatro sirenas sonrientes que denotan una clara influencia indígena. Para culminar la Ruta de la Sierra Gorda en Querétaro, se debe volver por la misma carretera 120 y a 4 kilómetros del anterior punto, se hallará una desviación a la izquierda. Sobre la carretera 190, luego de 23 kilómetros, se ubica Misión Tancoyol, en honor de Nuestra Señora de la Luz. De esta misión hay que ponderar su decoración interior de jaguares y adornos de estilo olmeca.
Tras haber visitado esta misión, uno se encuentra en los umbrales de la Huasteca Potosina. Por lo anterior, es recomendable hacer una escala en uno de los lugares más exóticos e imperdibles de la región: Xilitla, en San Luis Potosí, justo donde se encuentra el onírico y surrealista jardín de Edward James. Este último se localiza a unos 30 minutos de Tancoyol.