Nuestro país es uno de los destinos turísticos predilectos para los recién casados. Tener una luna de miel encantadora, es sencillo de lograr en una nación con tantos y tan variados lugares para vacacionar. Por ejemplo, si lo que se desea es una luna de miel en un ambiente tropical, México cuenta con numerosos destinos turísticos de playa, los cuales seguramente harán las delicias de los jóvenes esposos. En cambio, para aquellas personas que buscan gozar su luna de miel en un entorno colonial, nuestro país abunda en pintorescas ciudades de este estilo.
Profundizando en este tema, en lo que sigue, comentaremos algunos de los sitios más recomendables para vivir una luna de miel inolvidable en México.
Luna de miel en Cancún, Cozumel y Playa del Carmen
Cancún es reconocido como el destino de playa más importante de México. La hermosura de sus playas y la lujosa infraestructura turística, construida en torno a ellas, han hecho de Cancún un lugar de ensueño para el turismo nacional e internacional. Los recién casados, pueden gozar en Cancún de divertidas actividades de playa, como el snorkel, el buceo, o la contemplación de las muchas especies de corales y peces que allí habitan. Además, Cancún cuenta con una vida nocturna dinámica y sofisticada, ideal para pasar divertidas veladas de baile y convivencia con amigos. Al sur de Cancún tenemos a Cozumel, la más grande isla mexicana. Este lugar es idóneo para aquellas parejas que gustan de lugares interesantes y sugestivos. Y es que San Miguel, la principal población de Cozumel, fascina por sus contrastes. De día, con la llegada de los Cruceros que allí hacen escala, San Miguel luce dinámica y colorida, repleta de turistas. Por la noche, en cambio, cuando estos navíos parten, la ciudad se percibe silenciosa y solitaria, es decir, sumamente romántica. Por lo que se refiere a Playa del Carmen, se trata de un destino turístico sencillo y sin complicaciones, perfecta para una plácida luna de miel, en un ambiente natural y poco urbanizado.
Luna de miel en San Miguel Allende, Guanajuato y Oaxaca
Ahora recomendaremos tres ciudades mexicanas que van, desde lo colonial a la abundancia en tradiciones y cultura. La primera de ellas es San Miguel Allende, diminuta ciudad de bohemio ambiente y numerosas riquezas históricas. Vivir una luna de miel en San Miguel Allende, es experimentar el hechizo de un destino turístico que combina lo mejor de las ciudades mexicanas del pasado, con un estilo de vida más contemporáneo. Guanajuato, por su parte, ofrece la ventaja, para los recién casados, de que, al no tratarse de un destino turístico playero, no rebosa de viajeros y por ende, cuenta con una atmósfera más placida e íntima. Edificios hermosos, callejones románticos, cafés, restaurantes y salas de concierto, hacen de Guanajuato un destino de luna de miel, verdaderamente privilegiado. Por último, Oaxaca es perfecta para los jóvenes esposos que desean experimentar una luna de miel llena de cultura y tradiciones. Oaxaca combina, en su proyección turística, ecología, historia, arqueología y diversidad cultural.