La existencia cotidiana de los puertos mexicanos, se caracteriza por cierto aire nostálgico, como el que se desprende de un navío que parte. Pero en ciertas mágicas ocasiones, lo que se lleva el mar, el mar lo devuelve. Y en estos casos, el muelle se colma de bullicioso dinamismo, de anclas en busca de donde aferrarse, de embarcaciones y pescadores retornando con las redes rebosantes de presas. De este modo se proyectan las tardes en Ensenada, Baja California Norte, lugar de paso para las ballenas grises. Así entonces, conocer el Mercado Negro de Ensenada, es acercarse a la esencia de vida portuaria de este lugar del norte de México.
Las miríadas de mariscos y pescados que el oleaje trae consigo, termina con frecuencia en el Mercado Negro de Ensenada. El lugar recibe este nombre por el hecho de que en cierto tiempo allí se expendía langosta y abulón, cuando tales especies estaban bajo concesión a las cooperativas. Almejas, mejillones, pulpos, lenguados, mantarrayas y erizos se congregan en un ambiente de hielo transparente, botas de hule y piso humedecido. Se trata del Mercado Negro de Ensenada, un sitio muy frecuentado por lugareños, turistas y cocineros de los excelentes restaurantes y fondas de esta ciudad bajacaliforniana.
En las afueras de este centro comercial, se ubican varios diminutos restaurantes que preparan lo que recién se ha obtenido del mar. El ambiente de estos lugares se caracteriza por sus bancos de madera, el aroma del aceite en los sartenes y el rumor agitado del océano cercano. Y quien viste estos restaurantes pueden degustar deliciosos platillos como cocteles de camarón, pescados empapelados o fritos, tostadas de ceviche, tacos de pescado y tacos de marisco. Estos últimos se preparan con harina y bien fritos, con cebollita curtida encima.
En los restaurantes que están afuera del Mercado Negro de Ensenada también se puede disfrutar del caldo siete mares, una rica sopa que incluye callo de hacha, almeja, bagre, papa, camarón, zanahoria y papa. Además, lleva cilantro picado espolvoreado. Es una especialidad vaporosa, de grato sabor salado, que nos hace agradecer su sabor, el sabor de Ensenada.
El Mercado Negro de Ensenada se localiza en donde inicia el puerto, transitando por el Boulevard Lázaro Cárdenas, se da vuelta a la derecha en la calle Miramar. Este mercado popular abre al alba y permanece en actividad hasta las siete de la noche. Recomendamos visitar en las cercanías del mercado, el restaurante Muelle 3, en donde sirven la deliciosa sopa de cuatro almejas.