Nuestra vida cotidiana ha cambiado notablemente con respecto a lo que era hace algunos años. Hoy en día se ahorra mucho tiempo y se tiene acceso a una enorme cantidad de información, lo cual ha modificado por completo nuestro ritmo diario de vida. Como muestra de lo anterior hasta pensar en que podemos llevar nuestros miles de libros – bibliotecas enteras -, en algo tan diminuto como la uña de un dedo meñique. También ya no es necesario llevar una estorbosa brújula: si en el marco de una excursión campestre nos extraviamos, hay varias aplicaciones para nuestro dispositivo móvil que nos ubica en algunos segundos.
La información en nuestros días colma cada centímetro del entorno y define las actividades cotidianas, a veces sin que tomemos conciencia de ello. Son cosas de la modernidad, la cual hace tiempo que rebasó sus propias fronteras, siempre inciertas. Si a las personas de las décadas de los 70s y los 80s el futuro se traducía en el año 2000, a los que vinimos en los inicios del siglo XXI nos resulta más complicado visualizar como podría ser el porvenir. Pero para comprender tal desarrollo, conviene tomar en cuenta esta lista de cosas que hasta hace poco no existían y que hoy determinan por completo la actualidad que compartimos.
GPS – Si bien se trata de un invento de tipo militar, se ha ido adaptando para que cualquier persona lo pueda utilizar. En nuestros días cualquier persona lleva un teléfono con esta clase de tecnología. Hoy por hoy, alguien que desee llegar a cierto sitio, ya ni siquiera debe aprenderse la ruta: basta con encender el GPS y seguir las instrucciones.
USB – Las primeras memorias USB que se pusieron a la venta tenían hasta 250 megabytes. Las personas que tenían una memoria de 1 6B eran consideradas como privilegiadas y eso era hace apenas pocos años. Hoy en día hay memorias USB que tienen hasta 64 6B y son algo normal para todos.
Blue tooth – Subirse al automóvil y utilizar la música que uno almacena en su teléfono para reproducirla en el estéreo del coche, sin cable alguno, y sin tener que sacar el teléfono del pantalón, es algo habitual. Todo gracias al sistema Blue tooth. Sorprende pensar que hace algunos años para esta clase de acciones era necesario utilizar cable.
Otras tecnologías que han cambiado (para bien) nuestra vida cotidiana son: el reproductor digital de música, la cámara digital, la red Wi-Fi, Google y todos sus productos, el teléfono inteligente, etc., Lo que hace unas décadas hubiera parecido producto de la mente de genios de la ciencia ficción, como Bradbury, Asimov, Aldiss o Ballard, hoy en día es algo normal, gracias a estas tecnologías que cambiaron la vida cotidiana.