Con algo más de 63 metros de altura, la gran Pirámide del Sol es el edificio más imponente de la antigua ciudad mexicana de Teotihuacan. Recientemente, un grupo de investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México utilizaron una nueva técnica para buscar cámaras en el interior de la construcción. En su lugar encontraron un problema: la gran pirámide del sol podría derrumbarse si no se toman medidas.
El Doctor Arturo Menchaca, Profesor de Física en la UNAM, y miembro del comité nacional de ciencia del gobierno mexicano es el descubridor del problema. Menchaca y su equipo analizaron recientemente la pirámide utilizando muones. Estas partículas subatómicas atraviesan los materiales menos densos, pero se desvían en los de mayor densidad.
Mediante esta técnica, los investigadores esperaban poder hallar alguna cámara subterránea aún no descubierta como las que hay en el interior de la cercana Pirámide de la Luna. En su lugar lo que descubrieron es que la densidad de la pirámide es un 20% menor en un lado de la estructura que en el otro.
La pirámide del Sol no está compuesta de bloques de roca como las egipcias. Se trata de un montículo de tierra revestido de una fachada de piedra. Según los resultados presentados a finales de febrero por Menchaca, la diferencia de densidad entre ambas vertientes se debe a distintos niveles de humedad. El físico advierte que, de no tomarse medidas, la construcción podría sufrir un derrumbe parcial.
¿Por qué una pirámide con miles de años de repente tiene un problema de humedades? La razón parece estar, paradójicamente, en el cemento moderno. Hace décadas se utilizó este material para restaurar grietas de la edificación. Parece que esos arreglos dificultan la correcta evaporación del agua que se filtra en la pirámide con las lluvias.
Los investigadores mexicanos tratan ahora de determinar cuál es la mejor solución, si añadir agua a la mitad más seca, o tratar de reducir la humedad de la otra parte. No parece que la imponente pirámide vaya a sufrir daños a corto plazo, pero es necesaria una solución si se quiere preservar la espectacular subida a sus 238 escalones.