Cuando se está en el proceso de elegir un campamento, para que nuestro hijo aprenda el idioma inglés, se deben tomar en cuenta todas las opciones posibles. Por una parte tenemos los campamentos de verano organizado en México, pensado para que niños mexicanos aprendan el inglés y por otro, los campamentos realizados en el extranjero, en Estados Unidos, Canadá o Inglaterra., para que nuestro hijo se acerque al inglés con niños nativos en este importante idioma.
Si bien los campamentos de verano con inglés que se realizan en México, son prácticos y más accesibles económicamente, tienen algunas desventajas con relación a los campamentos que se efectúan en el extranjero. El principal inconveniente para aprender inglés en un campamento organizado en México es que todos los niños participantes tienen como idioma nativo e español y por ende, es imposible lograr una inmersión plena en el idioma inglés. No obstante, en algunos de ellos, los propios participantes animan a sus compañeros para que se comuniquen en inglés y puedan participar en los juegos que desarrollan.
En los campamentos de verano que tienen lugar en el extranjero, para que los participantes mejoren en su nivel de inglés, se acostumbra ubicar en una misma habitación a niños de distintos países, así como también en equipos de trabajo y juegos, donde se combinan las nacionalidades y los idiomas, para que todos se animen a comunicarse a través del idioma inglés.
Gracias a estas prácticas, en los campamentos de verano con inglés, no solo se incrementa el tiempo en que los niños se hayan expuestos al idioma inglés, sino que, además, el tiempo en que se comunican con sus nuevas amistades utilizando el inglés, es aún más valioso que cuando por caminar con los monitores y profesores. Y es que para los niños es mucho más sencillo aprender un idioma diferente jugando y divirtiéndose con otros niños y no tanto escuchando a un adulto en un salón de clase.
Mención aparte merece el beneficio de conocer culturas distintas a la propia, lo cual ayuda a que el niño sea más tolerante y sociable en su propia formación como persona. De tal modo que, cada vez que se acerquen las vacaciones de verano, en lugar de tener al niño o al joven aburriéndose en casa o perdiendo el tiempo comiendo golosinas y jugando horas videojuegos, es más sano para su salud física y mental tomar un campamento de verano con inglés.
Al tomar uno de estos paseos, además de perfeccionar su idioma inglés, el participante hará nuevos amigos, hallará en su propia persona talentos insospechados y entrará en contacto con culturas diferentes a la suya.